Por cuarto año consecutivo, 3 amigos y yo nos organizamos con anticipación para tener hoy el día libre e hicimos nuestra incursión en Mistura, perfeccionando cada vez mas nuestra técnica para poder probar un poco de todo.
Este año el local elegido me ha parecido el mejor de las 4 versiones a las que he ido. Espacioso, en una zona donde no perturba a los vecinos, un lugar abierto, creo que muy bien. A pesar de que acuden miles de personas cada día, no llegas a sentirte en medio de un tumulto. Una cola bastante largar para entrar pero que camina con rapidez y no nos significó ni cinco minutos. Colas grandes en el banco, sobre todo al empezar el día, para adquirir los tickets, pero habían muchos módulos, era cuestión de avanzar un poco mas. Creo que si hace falta que se instalen cajeros multimarca o del Banco de Crédito que creo que es el mas usado (al menos por mi!) POS en locales que se paga en efectivo podría también ser una buena opción. Se incrementarían las compras en el mercado por ejemplo.
La organización de la Feria por mundos me pareció muy interesante, nos permitió elegir al menos un plato por mundo. A ver si en la próxima versión encontramos el mundo de los saltados (un buen lomo saltado, un tallarin saltado, serían buenas opciones ...)
Así, empezamos nuestra visita al medio día en el Mundo de los Sánguches, con un clásico sandwich de chicharrón con camote y salsa de cebolla. Para acompañarlo compartimos chilcanos de camu camu, de lemongrass y clásico en Mayta. (Los chilcanos son una bebida buenísima preparada a base de pisco, ginger ale y limón, que en los últimos años se ha sofisticado con los piscos macerados con diversos productos). Luego caminamos hacia el mundo del cebiche. Apostamos por un tiradito a la crema del restaurant Punto Marino, que estaba buenísimo y una leche de tigre del Verídico de Fidel, que si bien estaba muy buena de sabor, creo que debe ofrecerse en vaso y no en envase bajo. Un chilcano mas para acompañar, esta vez uno con pétalos de rosa de La Picantería, bastante atrevido pero un poco subido de dulce para mi gusto.
Tocaba pasar por el Mundo Nikkei y nuestra elección fueron los wantanes rellenos con chanchito y verduras con salsa tamarindo de Majariscos, altamente recomendable. Chilcano de maracumango y de emoliente, otra vez de Mayta, buenísimos. El Mundo Norteño nos trajo tamalitos verdes con salsa de seco de Donde Peruco, simplemente buenos y una ronda norteña de carne aliñada, seco de chavelo con majado de yuca de la picantería La Paisana; bueno, pero he probado mejores.
Seguimos caminando rumbo al Mundo Amazónico, casi que el mundo "estrella" de este Mistura; nos pareció que ofrecía las mejores opciones. Platos provocativos de tan solo leerlos. Fuímos directo al Amaz, restaurante de un cheff peruano famoso, Schiaffino, y que es un restaurant joven con una propuesta de comida de la selva presentada en forma gourmet muy pero muy buena. Optamos por un pescado doncella con salsa de castañas de cajú, acompañado con arroz con coco. Divino! Otro mas de este mundo fueron los fettuccini con salsa de cocona y cecina de El Aguajal. Muy buena opción.
El día seguía transcurriendo y nosotros continuábamos con nuestro compartir. Los chicos decidieron caminar un poco y traer mas chilcanos, esta vez de Huaringas, mientras que nosotras optamos por visitar el cercano Mundo Andino, donde las propuestas que escogimos del Restaurant Turístico El Gordo, me parecieron buenísimas. La primera fue el denominado Qamtza Pichu, una mezcla de cancha con tortilla de huevo, cebolla china y charqui (carne seca de alpaca) y la segunda se llama Atallaushe, que es como un cebiche de charqui, muy bueno. (Miren la foto!)
Hasta el momento recalco que, pese a que algunos disidentes fundamentan su falta de interés por esta Feria en la cantidad de gente y colas y otros asistentes, con poca actitud y paciencia se quejan de lo mismo, no pasamos mas de 10 minutos en las colas. Digamos que la leche de tigre fue la mas larga, pero divididos para la compra no perturbó para nada.
Decidimos acercarnos al Mundo de las Brasas, la zona mas concurrida y no me explico porque. No es que el chancho al cilindro y el chancho al palo no sean platos buenísimos, pero no es precisamente lo mas original y dificil de conseguir. Creo que la publicidad siempre pone en primera plana al local del chancho al palo de Carlos Ramírez (que debería llamarse chancho a la reja). La cola aquí si que era interminable. Nos decidimos por el restaurant Chaxras y un lechoncito acilindrado con arroz meloso de porcón y chutney. El preferido según Manuelito, el arroz un poco crudo según Vane. A mi me pareció bueno pero tampoco el mejor plato del día. Luego la cola mas larga que hicimos fue en Warmi para comprar chicharrón de conejo y el bendito chanchito, ambos acompañados por carapulcra. Me gustó mas el conejo; costaba mucho partir el chanchito con un tenedor de plástico.
Empezamos a retroceder para seguir buscando alternativas, esta vez con ganas de conseguir algo dulce, así que directo al Mundo del Chocolate. Muy buenas opciones, presentadas en formas diferentes. Nos llamó la atención el Stand de Melate y las opciones de besos de moza con sabores distintos. Vane y Pollo optaron por uno de capuccino y uno de menta, yo compré de naranja y maracuyá pero para llevárselos a mis niñas. Los besos de moza son una golosina que evoca nuestra infancia. Una rica galleta de base con merengue francés encima y bañado con una capa de chocolate. mmmm! A mi me jaló la atención la variedad de bombones! Me compré tres que fueron compartidos con todos, por lo que tocó morder un pedazo de cada uno: el primero relleno con praliné y naranja confitada, espectacular!, el segundo relleno de ají, me pareció maravilloso! Un sabor rarísimo y el último fue de miel de picarón, que me pareció muy empalagoso. La verdad que ofrecían variedad de chocolates! Algunos con cancha incrustada! Las chocotejas prometían también. Un licor de chocolate en otro stand se veía divino y una belleza las esculturas de chocolate que decoraban el centro del Mundo del Chocolate.
Como corresponde, dimos un salto al Mundo del Café y caímos en el Stand de Blend Café, que agrupa café de distintas regiones peruanas, probamos un expreso de Huánuco, que me cayó como gloria.
Ahora si, dejamos de usar las mandíbulas y empezamos nuestro recorrido por el Gran Mercado, que presenta productos buenísimos! Lo que mas me gustó: la variedad de papas nativas, el jamón serrano y la variedad de quesos de Cajamarca y especialmente los licores de frutas de Inkanto!!! Me compré el licor de lima que me pareció una delicia y me lleve anotada la dirección de donde comprarlos, porque probé otros buenísimos tales como el licor de mandarina, camu camu, aguaymanto, fresa, frambuesa, entre otros. Totalmente recomendable, búsquenlos en facebook.
La incursión en el Mundo del Pan fue infructuosa. Me coloqué en la cola del Pan de Tres Puntas, típico pan arequipeño que es el deleite de mi esposo, pero después de unos minutos de hacer la cola, nos informaron que se había acabado y no pudieron darme indicaciones serias de la hora en que saldrían los siguientes; en el stand donde aún quedaban panes, la cola si era muy larga y decidimos salir sin pan.
Faltaba algo de postre y empecé la búsqueda del champús limeño, un postre de olla de la época de las abuelitas, hecho con harina de maiz amarillo, guanábana, mote, piña y membrillo. Se sirve caliente y para mi es una verdadera delicia. Después de mucho buscar lo encontré en el Mundo Norteño en el stand de Gotitas de Amor.
El stand de Nestlé, específicamente la cola para comprarle postres a Sandra Plevisani, con ella misma atendiendo, imposible. Ahí si que había una de esas colas que generan protestas, quizás 100 personas o mas en cola y ya eran como las 6:40 p.m. y nuestra incursión estaba a punto de terminar, así que adquirí alfajores para las niñas en otro stand y pasamos otra vez por el Mundo Nikkei para que Vane compre las tradicionales Cachangas, turrón y bombitas con miel, postres de carretilla de la niñez, todos bañados en miel de naranja. El primero parece una gran tortilla de masa crujiente, el segundo es un turrón muy compacto, hecho con unos palitos de masa y mucha miel y por último las bombitas son una masa, ignoro de que, rellena con crema. Todo deli pero bien grasosito.
Llegó la noche, la gente se iba y otra llegaba. El Mundo del Anticucho se veía bastante concurrido. Grimanesa y sus anticuchos ya tenía una cola considerable; nos quedamos sin probar los recomendados anticuchos de alpaca de Mama Feli. Tampoco dio el estómago para probar el rocoto relleno en el Mundo del Sur.
Hoy se terminó la licencia de un día otorgada por mi nutricionista, así que regreso a los quesos frescos, huevos revueltos, filetes con ensalada y gelatina de dieta. Pero quedo con el recuerdo del grato momento de ayer, que disfrutamos paso a paso con nuestro grupo de incursión. Todos con gran actitud y proactividad. Un éxito!
Gracias Vane, Pollo y Manuel!!! A organizarnos para el próximo año!!!
Nunca he ido a Mistura, y debo confesar que no me provoca ir, a pesar de la buena reseña que haces en esta entrada. Siempre he creído que se debe comer con calma, disfrutando y saboreando, no rodeada de gente que va "porque hay que ir, pues".
ResponderEliminarGaby, estoy segura que en plan de todo el día como voy yo, lo disfrutas sin prisa!
EliminarTerminarían afartukada como dicen en mi tierra,Asturias.
ResponderEliminarSL2
Nunca había escuchado esa palabra Miguel!
EliminarEs una expresión o forma de hablar astur,norte de España,es un dialecto antiguo que se llama bable,viene de fartuco que significa harto de comer tanto,en este caso.
EliminarSL2
Fue un día de placer largo y sin apuros...para disfrutarlo es necesario cancelar cualquier otra distracción! Solo lo puede disfrutar la persona capaz de abstraerse del resto del mundo.
ResponderEliminar